Mató a su amiga, la decapitó y la metió en una valija: quería quedarse con su plata
Una osteópata del Reino Unido usó sus conocimientos en disección médica y mató a su amiga de 67 años. El objetivo fue heredar el patrimonio de la misma. Por este brutal asesinato a sangre fría, la mujer fue encarcelada con una sentencia de 34 años.
El crimen fue ejecutado por Jemma Mitchell, quien buscaba cambiar la opinión de Mee Kuen Chong acerca de financiar una renovación de su casa. Durante el juicio en el tribunal de Londres, se mostraron imágenes de la acusada llegando a la casa de la víctima con una gran valija.
Luego de cuatro horas dentro, la mujer fue captada saliendo de la casa con problemas al trasladar la valija. Al sentenciar a Mitchell, el juez Richard Marks calificó su crimen de "escalofriante" y "profundamente impactante".
A las dos semanas del asesinato, la acusada viajó hasta la ciudad de Salcombe, en el suroeste de Inglaterra. En este mismo lugar, unos turistas encontraron el cuerpo y la cabeza de la víctima. Estaban junto a un sendero del bosque cerca de la ciudad.
La fiscalía sentenció que Mitchell orquestó su amistad con la mujer para después asesinarla. Cuando Chong se retractó de darle £ 200.000 para pagar las reparaciones de la casa en ruinas de £ 4 millones que compartía con su madre en Londres, Jemma la asesinó y armó un testamento para poder heredar gran parte de la mujer.
Luego de que se decreto la sentencia, el detective que dirigió la investigación dijo que la acusada nunca aceptó la responsabilidad del asesinato, lo que dejó muchas preguntas sin respuestas.
