"Perdón, no pude hacer nada aquel día", la palabra de un testigo
Se trata de Tomás Bidonde, quien declaró este jueves y apuntó contra dos de los imputados por el crimen de Villa Gesell.
Tomás Bidonde fue el primer testigo de la cuarta jornada por el juicio del crimen de Fernando Báez Sosa. El joven estuvo la noche del 18 de enero de 2020 en Le Brique con un amigo y cuando salió del boliche presenció la pelea. Días después, cuando tomó conocimiento de la muerte del estudiante de Derecho, llamó a la fiscalía para dar su testimonio. Este jueves se quebró ante el TOC N°1 cuando le tocó recordar lo vivido, y más tarde se fundió en un abrazo con Silvino y Graciela, los padres de la víctima. "Perdón porque no pude hacer nada aquel día", les dijo.
Bidonde se sentó este jueves frente al Tribunal Oral Criminal N°1 de Dolores y declaró que vio cuando Máximo Thomsen le pegó "dos puntinazos" en la cabeza a la víctima cuando ya estaba en el suelo, y apuntó a Ciro Pertossi como otro de los agresores que lo golpeó "en la espalda y costado" también en el piso.
Tras su declaración, Bidonde salió de la sala de audiencias y en las escaleras del Palacio de los Tribunales también se fundió en un abrazo con Tomás D’Alessandro, el amigo de Fernando que declaró en la segunda jornada y con quien la víctima tenía un vínculo estrecho. La imagen conmovió a todos. "A Fer le encantaba ir a su casa", contaría Graciela.
n un cuarto intermedio, la mamá de Fernando recordó el abrazo con el testigo con una sonrisa. "Me pidió perdón al oído, me dijo que no pudo hacer nada, que se quedó shockeado", le relata la mujer a Infobae. "Yo le contesté que aunque hubiera querido hacer algo, no hubiera podido porque a mi hijo le tendieron una emboscada. Le dije: ‘No me pidas perdón porque hiciste lo que pudiste. Te agradezco por todos los testimonios que diste y te pido que seas feliz’".