Descubrió que una amiga le robó la tarjeta de crédito para hacer una compra

Las tarjetas de crédito son uno de los datos más sensibles de las personas, ya que con saber los números de adelante y los tres del código de seguridad se pueden hacer varias compras, y más si se trata de una tarjeta de crédito. Incluso, cuando las personas las extravían, al instante buscan darlas de baja por el riesgo que podría ser que cualquier persona se la encuentre.

En este caso, una chica sufrió el robo de una de sus mejores amigas, con una de las extensiones de la tarjeta de crédito de su mamá. En un principio, la mamá le preguntó a su hija si había hecho una compra sin su permiso, pero en realidad ella se encontraba en la casa en el sillón, y luego pensaron que le habían robado los datos a la chica.

Lo cierto es que mientras llamaban al banco para realizar el reclamo correspondiente, se realizó otra compra y crecieron las dudas entre la mamá y la hija. Luego de todos los reclamos y las cancelaciones, el banco les devolvió toda la plata que se había gastado y volvió todo a la normalidad. El hecho fue el 27 de febrero, pero la chica se dio cuenta casi un mes y medio después.

Con el paso del tiempo, la incomoda situación quedó detrás, pero en el momento menos esperado, cuando esta chica se dirigió a la tienda en la que nunca había comprado, y decide realizar su primer compra. En la parte del pago, la cajera le pide el documento de identidad para saber si estaba registrada, y cuando lo da ve que estaba registrada.

Luego del pago, le entregan el comprobante con los siguientes datos: Documento de identidad, su nombre, una dirección, un número de teléfono y además un correo electrónico. Estos últimos tres no coincidían con sus datos, por lo tanto, decide comprobar de quien era el teléfono, revelando el número de su mejor amiga.

Mientras escribe el número en su teléfono celular, aparece que una de sus mejores amigas coincide con el número, finalmente encontrando quien había robado los datos.