Tras recibir al ministro de Ucrania, el papa Francisco visitó Hungría
En medio de la invasión rusa, el sumo pontífice agradeció a los húngaros la acogida al pueblo ucraniano.
Después de haber reiniciado su agenda tras haber permanecido unos días internado,
el papa Franciscorecibió al primer ministro de Ucrania, Denys Shmyhal
, y ayer aterrizó en Hungría, donde este sábado agradeció la acogida al pueblo ucraniano a más de un año del inicio de la invasión rusa.
El sumo pontífice abogó por una cultura de la caridad en una nación donde el primer ministro ha justificado sus férreas políticas antimigratorias con el temor a que los migrantes supongan una amenaza para la cultura cristiana de Europa.
En su segundo día en Hungría, Francisco se reunió con refugiados y pobres en la iglesia de Santa Isabel, bautizada en honor de una princesa húngara que renunció a su riqueza para dedicarse a los necesitados siguiendo los pasos del santo, del que el pontífice tomó su nombre, San Francisco de Asís.
En su discurso en la iglesia de ladrillo blanco de la capital, Budapest, Francisco recordó que el Evangelio pide a los cristianos que muestren amor y compasión a todos, especialmente a quienes viven en la pobreza y el dolor "e incluso (a) los que no creen".
"El amor que Jesús nos da y que nos manda vivir contribuye entonces a extirpar de la sociedad, de las ciudades y de los lugares donde vivimos, los males de la indiferencia y del egoísmo, y reaviva la esperanza de una humanidad nueva, más justa y fraterna, donde todos puedan sentirse en casa", afirmó.
El gobierno nacionalista de Hungría ha aplicado políticas antimigratorias firmes y se ha negado a aceptar a muchos de los solicitantes de asilo que tratan de entrar al país por su frontera sur, lo que derivó en prolongadas disputas legales con la Unión Europea.