Feet Finder, el polémico negocio de vender fotos de pies
Un polémico negocio que se promociona a través de influencers de la reconocida red social.
TikTok es una de las redes sociales que ganó más popularidad en los últimos tiempos entre los más jóvenes. Esto se debe a una infinidad de contenido que va desde chistes, recetas, hasta retos virales.
Precisamente esta semana, hubo un caso en Santa Fe que conmocionó a la opinión pública, ya que una niña de 12 años murió por un reto viral de esta red social. La pequeña perdió la vida por ahorcamiento y no se detectaron signos de abuso ni participación de terceros, según detalló la pericia.
Sabemos que las redes sociales son un caldo de cultivo para todo tipo de contenidos -que muchas veces rozan lo ilegal-, con lo cual la aparición del nombre Feet Finder generó más que una gran polémica, aunque no una sorpresa.
Lo más peligroso es que los menores son los que están más vulnerables a este tipo de contenido que puede compartirse o filtrarse en esta red, sobre todo cuando son utilizadas para promocionar un producto o negocio a través de influencers, figuras públicas de gran llegada que tienen en su público todo tipo de rango etario.
Qué es Feet Finder
Un informe de Telenueve, por El Nueve, explicó que se trata de una plataforma para la venta y compra de fotografías de pies con fines sexuales y fetichistas que está siendo promocionada por varios influencers en TikTok bajo el argumento de que es una forma sencilla de ganar dinero.
"¡Ganemos plata juntos!", "Algunos los llamas depravados, yo les digo cajero automático", "Dejá de hacer lo que estás haciendo y ponete a laburar", son algunas de las frases que utilizan.
Cabe destacar que la edad mínima para registrarse en TikTok es de 13 años, por lo que esta venta está al alcance de una enorme cantidad de usuarios que son menores de edad.
El fetichismo por los pies
La podofilia o el fetiche de pies se refiere al interés sexual pronunciado por los pies. Una persona puede sentirse atraída por los pies debido a distintos factores, como la forma y su tamaño, o el de los dedos, los tratamientos, la ropa de esa parte, el olor corporal o por la interacción sexual con ellos.
Cómo logró filtrarse en TikTok el negocio de vender fotos de pies
TikTok no permite ninguna clase de contenido que sea de índole sexual o que contenga fetichismo, sin embargo, Feet Finder pudo lograr "infiltrarse" de igual manera gracias a la intervención y promoción de influencers pagos y, en todo caso, el algoritmo de la red social lo detecta como un video gracioso, en última instancia.
"TikTok particularmente no permite publicar o compartir contenidos que promuevan o glorifiquen los servicios sexuales. Específicamente prohíbe el contenido que represente un fetiche o la estimulación sexual.
Sin embargo, este tipo de publicidades en cuentas con un montón de seguidores son inequívocamente promoción de eso", precisó Marina Benítez Demtschenko, abogada y presidenta de la fundación Activismo Feminista Digital, sobre los términos y condiciones de la red social.
"Al estar pensada como una plataforma para mayores de 13 años tiene una amplitud importante en cuanto a las edades, cosa que en otras plataformas tal vez no tanto. Pero Feet Finder está pensada para mayores de 18", continuó, en diálogo con Telenueve.
¿Cuánto gana una persona por subir contenido a FeetFinder?
En realidad el sistema es simple. Los creadores se quedan con el 80% de las ganancias de su perfil y la plataforma retiene el 20%.
El precio promedio de una fotografía en FeetFinder es de 22 dólares; y 19 dólares en el caso de los videos de pies.
Para abrir una cuenta solo requieres ser mayor de 18 años, pagar una suscripción para creadores de 3.99 dólares al mes o 14.99 dólares al año y comenzar a subir contenido.
Los riesgos de vender fotos de pies
Sebastián Bortnik, fundador de la ONG Argentina Cibersegura, consideró que lo peligroso de esta tendencia es "la inercia digital o tecnológica", es decir, tomar algún comportamiento sin reflexión previa. "Alguien puede instalar la idea de que es inofensivo compartir fotos de pies, pero se empiezan a generar hábitos respecto a la privacidad, el cuerpo e internet que pueden ser poco sanos", agregó.
"En estos casos se está fomentando que vayan a una plataforma con tres aspectos muy peligrosos. Primero, se los invita a una página con la promesa de ganar dinero, entonces hay una competencia injusta que los puede llevar a lugares peligrosos. Como los menores no tienen muchos recursos para hacer plata, algo muy sencillo como mostrar los pies es peligroso. Por otro lado, se trata de una plataforma para mayores de 18 años. Y por último, otro riesgo tiene que ver con la posibilidad de que esto escale", desarrolló el especialista en ciberseguridad.
¿Cómo proteger a los menores de edad de los riesgos en redes sociales?
- Navegar paralelamente por donde circulan los menores de edad: "Lo único que nos queda hacer a los mayores de edad a cargo es saber de esto pero no por leerlo sino por verlo. Eso implica estar en cada uno de los entornos digitales en los que nuestros hijos e hijas, primos, ahijados, sobrinos o etc están", precisó Marina.
- Estar atentos a las tendencias o anuncios que son repetitivos: Entender por qué aquello que se promociona genera tanto furor entre los más jóvenes. Revisar hashtags y temas recurrentes de conversación dentro de la comunidad.
- Desconfiar de las promociones provenientes de grandes cuentas: "Cuando algo está evocado por perfiles con muchos seguidores o seguidoras normalmente se da en función de publicidades pagas. Si está infringiendo términos y condiciones va a tender a ser difundido de una forma que llegue amigablemente", prosiguió la abogada.
- Leer las normas de comunidad, términos y condiciones y entenderlos: en el último tiempo, las plataformas se han esforzado por demostrar mayor transparencia. Los términos y condiciones son cada vez más amigables debido a los reclamos de los usuarios que encontraban estos textos inentendibles.
- Hablarlo y darle a conocer al menor de edad los riesgos a los que se expone: "Es muy difícil seguir el ritmo de los chicos. La forma de seguirlos es estar cerca de ellos, que sepan que pueden dialogar, preguntarles qué estar haciendo, pedirles de forma aleatoria que nos muestren lo que están viendo y consumiendo. Con ese diálogo nos va a permitir a los adultos identificar actitudes que nos puedan resultar potencialmente peligrosas", comentó Sebastián.