Conflicto entre un vecino y una escuelita de fútbol: "Queremos con los dejen jugar"
Molesto por los pelotazos, el hombre los denunció. 50 niños se quedaron sin entrenar y los padres se quejan.
La "supuesta" plaza del Bº Bella Vista I y II de Pocito era un baldío. Los niños la limpiaron y la transformaron en una cancha de fútbol. Allí juegan a la pelota en la escuelita que está a cargo de dos profesores, que además de enseñarles la actividad, los contienen y los sacan de la calle.
¿Qué ocurrió?, un vecino molesto por los pelotazos, gritos y ruidos los denunció. No solo eso, sino que además cuando se cae una pelota al fondo de su vivienda, se las devuelve rota. Lo peor de todo es que los amenazó con bajarles los arcos de fútbol.
Tras la denuncia de este hombre, que es efectivo de la policía, más de 50 chocos menores de edad de los dos Barrios se quedaron sin poder jugar al deporte que aman.
Radio del Sur llegó hasta el lugar y entrevistó a los padres de los chicos y vecinos del Barrio para tomar conocimiento más profundo de la problemática que están atravesando.
"Queremos que los dejen jugar a la pelota. El Municipio está llevando el expediente y supuestamente la orden ya está para que la retiremos y los niños puedan volver a jugar a la pelota. No hacen nada malo, es un deporte que los contiene y los saca de la calle. Le molestan los pelotazos o los ruidos, bueno que hable y vemos como lo solucionamos, pero con ese hombre no se puede hablar. Es más les devuelve las pelotas rotas, cuando se caen a su casa y quiere sacar los arcos", comentó uno de los padres.
Tan lejos llegó el reclamo de este hombre, que "estamos esperando la fecha para ir a declarar al juzgado de paz del departamento.
Marcela, otras de las vecinas indignada con la actitud de este vecino, también alzó la voz: "además este señor agredió a los profesores. Ese día tuvieron que ir a declarar y tanto los profesores como mi marido quedaron demorados. También estamos esperando que no nos saquen una multa, porque no tenemos cómo pagarla. Si esta plaza era un baldío, y los niños la arreglaron. La limpiaron y todo", le terminó narrando esta señora al periodista de Radio del Sur Roberto Olivares.