Realizar actividad física reduce el riesgo de desarrollar varios tipos de cáncer
Un amplio estudio científico realizado en más de un millón de jóvenes de Suecia confirmó la relación entre el ejercicio y la baja incidencia de enfermedades oncológicas, especialmente gastrointestinales.
Cada vez son más estudios los que se acumulan en favor de la práctica del ejercicio físico como forma de estar saludable y prevenir diversas enfermedades. Ahora, una nueva e importante investigación que siguió a más de 1 millón de hombres jóvenes en Suecia durante un promedio de 33 años, brindó conclusiones importantes en la relación ejercicio-cáncer.
El estudio, publicado ayer en el British Journal of Sports Medicine, encontró que los hombres con altos niveles de aptitud cardiorrespiratoria en la edad adulta temprana tenían un menor riesgo de desarrollar hasta 9 formas de cáncer a futuro en pulmones, riñones y el sistema gastrointestinal, entre otros órganos.
La investigación tomó como punto de partida las pruebas físicas realizadas a más de un millón de jóvenes suecos de 18 años durante las pruebas para ingresar al servicio militar, que incluían pedalear en una bicicleta estática con niveles crecientes de resistencia. Los resultados de este análisis se utilizaron para clasificar a los participantes en distintos niveles de aptitud cardiorrespiratoria.
Distintos son los estudios científicos que aseguran la relación entre la práctica deportiva y la disminución de varias enfermedades, incluida le cáncer (Getty Images)
La prueba consistía en andar en una bicicleta estacionaria, primero con un nivel de resistencia bajo durante cinco minutos, luego con un aumento de la resistencia de 25 vatios por minuto hasta que los participantes estaban demasiado cansados para continuar.
Los autores del nuevo estudio clasificaron a los participantes en niveles bajos, moderados y altos de aptitud cardiorrespiratoria, una medida de qué tan bien los sistemas cardiovascular y respiratorio de una persona suministran oxígeno a los músculos, según los resultados de sus pruebas de bicicleta.
Descubrieron que las personas con niveles altos de condición física tenían un riesgo 19 % menor de cáncer de cabeza y cuello y 20 % menos de cáncer de riñón en comparación con el grupo de baja condición física.
"Una dosis mínima de alrededor de 3,5 minutos por día se asoció con una reducción del 17% al 18% en el riesgo total de cáncer en comparación con no realizar ninguna actividad de este tipo", dijeron los investigadores (Getty)
Mientras tanto, el riesgo de cáncer de pulmón fue un 42% más bajo para los participantes más aptos, aunque eso se explicó principalmente por los hábitos de fumar de las personas. A pesar de sus hallazgos, el estudio tiene limitaciones, como no incluir a mujeres y no evaluar los estilos de vida de los participantes después de las pruebas iniciales.
El doctor Aron Onerup, autor principal del estudio y miembro de la Universidad de Gotemburgo en Suecia, destacó que no es necesario ser un atleta de élite para obtener estos beneficios. "Simplemente mejorar la condición física puede reducir el riesgo de varios cánceres", afirmó Onerup, que también señaló un descubrimiento sorprendente: aquellos con alta condición física tenían un riesgo casi 40% menor de desarrollar cánceres gastrointestinales.
Moverse es prevenir, dicen los expertos
Consultado por Infobae, el doctor Diego Kaen (MP 1898), presidente de la Asociación Argentina de Oncología (AAOC), remarcóla importancia de la práctica del ejercicio físico respecto al cáncer y otras enfermedades.
La práctica de buenos hábitos alimentarios ayuda a reforzar el sistema inmunológico (Getty)
"El estado físico, el ejercicio, influye muchísimo en la salud, no solamente en el cáncer, sino también por ejemplo en la patología cardiovascular. Ahora bien, uno tiene que entender que si uno logra no fumar, no tomar alcohol, consumir una dieta más sana basada en fibras y verduras, y logra hacer ejercicios por lo menos 3 a 4 veces a la semana 60 minutos de una actividad aeróbica, puede disminuir hasta un 40%, la probabilidad de tener un cáncer", precisó el experto.
"No hay ninguna maniobra que disminuya tanto la probabilidad de tener un cáncer de una persona que el cambio de hábito de vida. En cuanto al ejercicio hay muchísimos estudios que demuestran dos cosas, primero que el hacer ejercicio fisiológicamente disminuye el proceso inflamatorio del organismo y el poder tener cáncer. Incluso, también se ha estudiado que realizar una actividad aeróbica regular disminuye la probabilidad de que una persona que tuvo cáncer, le vuelva a padecer. Esto está totalmente estudiado en cáncer de mama y cáncer de colon por ejemplo", precisó Kaen que es director del departamento de investigación clínica del Centro Oncológico Riojano.
Respecto a por qué el ejercicio debería incorporarse como hábito de vida, el también profesor de la Universidad Nacional de la Rioja indicó que el ejercicio es parte del cambio de hábitos de vida. "El ejercicio es sano en cuanto a disminución de estrés, que implica bajar el estado inflamatorio del cuerpo. Significa asimilar mejor los alimentos, disminuir por ejemplo enzimas como la insulina. O sea, hay un montón de factores médicos que generan una vida saludable. Y recordemos que la vida saludable es parte de la prevención de muchas enfermedades cardiovasculares, óseas, reumatológicas y de cáncer inclusive", concluyó el especialista.
Efectos beneficiosos para la salud
La actividad física intermitente y vigorosa implica ejercicios breves y enérgicos como caminar rápidamente, subir escaleras o correr para alcanzar el transporte público (Getty)
En tanto, el doctor Ramiro Heredia médico clínico del departamento de Medicina Interna del Hospital de Clínicas José de San Martín precisó a Infobae que el practicar actividad física en forma regular tiene efectos beneficiosos a la salud. "Es probado el efecto protector que tiene el practicar ejercicio regular contra enfermedad cardiovascular o sea riesgo de tener un infarto de miocardio, un accidente cerebrovascular, una muerte súbita de causa cardíaca. Asimismo ayuda a prevenir o a controlar distintos factores de riesgo de enfermedades asociadas a la enfermedad cardiovascular como son la hipertensión arterial, la dislipemia, la diabetes mellitus tipo 2, la obesidad y el sobrepeso"
"Respecto al cáncer existe evidencia científica que nos dice que las personas que practican actividad física en forma regular tienen un menor riesgo de generar varios tipos de cánceres y en caso de enfermar tienen un mejor pronóstico. Sabemos hoy que el tener un buen estado físico y practicar actividad física en forma regular, reduce la incidencia de distintos tipos de cánceres. Un trabajo publicado hace algunos años observó una reducción en cáncer de pulmón de un 47%, del cáncer colorrectal de un 26% y cáncer en general de un 14%. Es por eso que en la consulta médica diaria y a través de distintas instituciones biomédicas y autoridades sanitarias el practicar actividad física en forma regular tiene que estar dentro de las recomendaciones", apuntó Heredia.
"Sin ir más lejos el año pasado la Asociación Americana del Corazón publicó la lista de los ocho esenciales de la vida en los cuales la actividad física es uno de ellos, junto con dormir adecuadamente, controlar el colesterol, controlar la glucosa, controlar la hipertensión arterial, tener un peso corporal normal, tener una dieta balanceada no fumar, entre otros", finalizó el especialista del Hospital de Clínicas.
Si todas las personas realizaran 75 minutos por semana de actividad física de intensidad moderada, se evitaría alrededor de una de cada diez (10%) muertes prematuras (Gettyimages)
Cinco minutos diarios de ejercicio intenso pueden marcar la diferencia
Un estudio reciente publicado en la revista JAMA Oncology , realizado por la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Sydney, Australia, ha revelado que solo 5 minutos diarios de actividad física vigorosa pueden reducir significativamente el riesgo de cáncer. Esta actividad se refiere a ejercicios breves y enérgicos, como caminar rápidamente, subir escaleras o correr para alcanzar el transporte público.
Los investigadores analizaron la actividad física de más de 22.000 adultos durante un período de 7 años y descubrieron que aquellos que realizaron entre 3 y 6 minutos diarios de actividad física intensa tuvieron tasas de cáncer 17-18% más bajas. Además, aquellos que promediaban 4,5 minutos al día de esta actividad tenían hasta un 32% menos de probabilidad de desarrollar enfermedades oncológicas.
En una revisión científica exhaustiva realizada en 2016 y publicada en JAMA Internal Medicine , los investigadores descubrieron que la probabilidad de desarrollar 13 tipos comunes de cáncer, como los de mama, estómago, vejiga, colon y sangre, se reducía considerablemente en hombres y mujeres que practicaban ejercicio de manera regular.
Hacer una rutina de ejercicios ayuda a bajar el riesgo de varias enfermedades (Getty Images)
Un estudio más reciente , llevado a cabo en 2022, llegó a la conclusión de que aproximadamente 46,356 casos anuales de cáncer en los Estados Unidos, lo que representa alrededor del 3% de todos los casos, podrían prevenirse si todas las personas que actualmente no hacen ejercicio comenzaran a hacerlo.
Sin embargo, es importante destacar que la mayoría de estas investigaciones se centraron en individuos que realizaban ejercicio durante al menos 30 minutos casi todos los días. Esta cantidad de tiempo es la mínima recomendada por la OMS, lo que plantea la pregunta de si períodos más breves de actividad física también podrían tener un impacto significativo en la reducción del riesgo de cáncer.