Rescataron a un nene de 11 años que quedó atrapado en la red del balcón de un octavo piso
El menor de edad salió al balcón del décimo piso y comenzó a bajar. Uno de sus vecinos lo rescató y le salvó la vida.
Un nene de 11 años con autismo fue rescatado por sus vecinos después de haberse trepado por los balcones del décimo al octavo piso, donde terminó enganchado de las redes del balcón. El hecho ocurrió en Rosario y, según confirman los medios locales, no es la primera vez que el menor de edad pasa por una situación similar.
Dos trabajadores, Rodrigo y Facundo, que se encontraban en la intersección de la avenida Pellegrini y Corrientes, pudieron ingresar al edificio en donde subieron hasta el piso 8 y rompieron la puerta para rescatar al niño que estaba solo con su hermano.
Rodrigo, uno de los rescatistas, contó en diálogo con El Trece cómo fue el dramático momento: "Subimos por el ascensor, llegamos hasta el lugar de la puerta en donde estaba el nene y tumbamos la puerta", explicó. El chico había quedado enganchado de la red de un balcón a punto de caerse desde una altura considerable.
"Una señora nos dio un cuchillo para cortar la red, mi compañero la cortó y lo agarramos para ayudarlo", contó. El hombre explicó que el nene se había colgado desde el décimo piso y fue bajando hasta el octavo mientras se trapaba de las redes. Además, aclaró que el menor tiene autismo, por lo cual debieron bajarlo con un mayor cuidado para no asustarlo más. "Él no hablaba, solo lloraba", expresó.
"El hermano estaba desesperado y cuando lo rescatamos se puso a llorar", comentó Rodrigo, el héroe del día que trabaja como repartidor y se encontraba por la zona de casualidad cuando vio la escena.
Además, dijo que la situación lo emocionó ya que es padre de dos hijos, de 9 y 5 años, y entiende lo peligrosa que fue la secuencia: "Lo rescatamos con mi compañero y me puse a llorar. Los dos lloramos".
De acuerdo a medios locales, el mismo nene sufrió una secuencia similar en el 2018 donde también fue rescatado a tiempo. "Imaginate que yo estaba ahí arriba, miré para abajo y dije ‘No, ¿qué estoy haciendo’", manifestó Rodrigo, quien no sabe cómo hizo para que el menor entre al balcón del departamento del piso 10.
"Íbamos temblando, respirando profundo, nadie decía una palabra. Todos pensábamos lo mismo, en querer llegar", agregó Facundo relatando su experiencia. "Fue una locura pero salió todo bien", concluyó.