¿Cómo es el temperamento de cada signo del zodiaco?
La astrología y el horóscopo revelaron cómo es el temperamento de cada signo zodiacal al detallar sus características más fuertes y "polémicas".
No todo es color de rosa en el mundo del horóscopo, ya que quienes creen en el poder del zodiaco para ofrecer una visión más transparente sobre la personalidad que compone a cada signo, deben asumir el riesgo de encontrarse con aquellos rasgos que menos celebran de sí mismos, o de la persona sobre la que se quiere profundizar.
Conocerse implica también dar lugar constantemente a nuevos interrogantes sobre sí mismo, en general, accionamos de la manera que más nos favorece o si caemos en el sabotaje. La terquedad, los impulsos, la firmeza y la soberbia, se pueden hacer presentes más de lo que uno puede llegar a notar, y en este punto, la astrología puede ser la creencia ideal para detectar aquellos aspectos.
Para conocer un poco más sobre cada signo, los astros develaron ante nosotros cómo es el temperamento de cada uno, en el que el elemento al que permanece enlazado tiene mucho que ver: los signos de agua suelen reaccionar de forma más emotiva, mientras que los signos de tierra lo hacen de forma más equilibrada.
A su vez, los signos de aire tienden a estar más conectados con la dimensión comunicacional, por lo que sus reacciones serán del orden racional. Por último, los vinculados al fuego serán más peleadores, tercos e impulsivos.
Signos: cuáles son los más impulsivos y temperamentales del zodiaco
Aries
Por su personalidad intensa e impulsiva, suelen estar a la defensiva al momento de sentirse atacados. Su comunicación se vuelve algo insensible en este punto, y puede llegar a ser muy hiriente debido a su temperamento firme. Los que más pueden alterarlo son aquellos que vayan contra su parecer, o si le hacen perder su preciado tiempo, dado que es un signo al que le cuesta ponerse un freno una vez que comienza el enfrentamiento.
Tauro
Estas personalidades no se enojan fácilmente, ya que suelen estar ligadas a la armonía y el equilibrio. Sin embargo, un detonante puede ser por lo monotemáticos que pueden tornarse: hasta no cerrar una discusión que viene dando vueltas en su cabeza, empujarán la discusión hasta lograr tener la última palabra. Lo notarás por su indiferencia y su frialdad, que no lo deja pasar de página.
Géminis
Este signo es comunicación, a veces por demás, lo que puede ser algo problemático si se emplea para el ataque. Puede estallar si le desorganizan sus planes iniciales, y sacar a relucir sus rasgos más caprichosos que hasta pueden devenir en crisis existenciales por sus intensas emociones. Ahora bien, al momento de cansarse de esta situación, pueden bajar de ese tobogán emocional y seguir como si nada. Sus dos costados revelan que puede ser nervioso y efusivo, y al minuto calmo y dialógico.
Cáncer
Cuando se enojan, adoptan una actitud pasivo-agresiva, que gracias a la acumulación de irritación llegarán a explotar inesperadamente. Nunca es bueno verlo en este estado, ya que toda su parte afectiva y cálida que llevan consigo, se volverán al lado opuesto, llegando a sacar su lado más frío luego de sentirse gravemente heridos.
Leo
A los leoninos les gusta andar y decidir por sí mismos, por lo que detestan que les digan que hacer. Es líder y ‘’amo’’, y sabe bien hacia donde ir. Sacarán su temperamento más firme frente a este tipo de intentos de dominación por parte del otro. Alberga un caracter fuerte que responde muy bien a la indiferencia. Difícilmente deje pasar alguna situación que le haya afectado y no dejará pasar la oportunidad de decirle al otro que es responsable de su enojo.
Virgo
En la vida de los nacidos bajo el sol virginiano todo debe ser planificado y ordenado. Quien desate el caos en su mundo de organización y rutina sacará lo peor de sí, y pasará a estar en su lista ‘’negra’’ de personas no gratas. Su temperamento es firme y equilibrado, por lo que se puede ver que no es tan impulsivo, sino más bien razonable, y utilizará la lógica en todo momento para no reaccionar exageradamente.
Libra
Este signo evita las discusiones a toda costa, es más, las detesta. Por esto puede llegar a acumular una gran cantidad de irritación en su cabeza, lo que puede derramar el vaso de su cordura. Para esto, es necesario ser meditativo y lograr una buena comunicación, para poder pasar la página y salir de ese estado. De todas formas, lo que tengan que decir, lo dirán de la manera más ‘’amena’’ posible. No es un signo agresivo que estalle por los aires, pero sí deben ser claros y directos.
Escorpio
Los favoritos del Horóscopo Negro: la furia y el descontrol emergen cuando un Escorpio se enoja. Esto sucede por varios motivos, cómo si se meten en sus asuntos personales, o si rompen cierto compromiso, o si los ‘’pinchan’’ frente a alguna situación. No tendrá piedad y sacará su costado más peleador para entrar en combate, y puede ganar fácilmente. Es muy emocional y apasionado, lo que lo vuelve más resistente a las disputas.
Sagitario
Los aventureros del zodiaco son muy amistosos y no suele tener enemigos, sin embargo, suele tener un temperamento muy fogoso que puede exteriorizar muy velozmente en una situación tensa. No se irrita fácil, pero si lo buscan, saca lo peor de sí. Sabe pelear y llevar la discusión al máximo hasta que logre calmarse.
Capricornio
Rara vez puede descontrolarse, ya que tiende a mantener en eje sus impulsos. Pero, si sucede, es porque desataron la fuerza interior más reacia que hay dentro suyo. Es muy rencoroso y nunca se olvidará de los detalles que le molestan y que lo hieren. Esto logra frustrarlo al 100%, dado que se decepciona fuertemente. Se verá en su frialdad y en la distancia automática que toma, y aunque parezca que lo superó, sólo siguió adelante.
Acuario
En este caso, tienden a ignorar a quién lo lastimó o intentó hacerlo, y no darle importancia a quienes quieran perturbar su armonía. Es equilibrado y centrado, lo que hará que no exhiba el malestar y el fastidio, más bien, continuará como si nada. A lo sumo, puede llegar a distanciarse naturalmente del asunto, pero no pasa a mayores.
Piscis
Piscis es dramático por naturaleza, ya que sus emociones están a flor de piel y lo sabe: las discusiones sacan lo peor de sí mismo. Lo hieren fácilmente y entrará en combate más de una vez si es necesario. Al contrario de ser débil, estas situaciones lo conectan más con sus sentimientos y le hacen chocar contra su mundo ideal.