Cómo será el bastón presidencial que tendrá Javier Milei
En su asunción del 10 de diciembre, el líder libertario portará la tradicional vara que generó muchas dudas por su elaboración. Juan Carlos Pallarols, el histórico orfebre, explica cómo será.
Juan Carlos Pallarols, histórico orfebre, será nuevamente el encargado (como hace 40 años) de hacer el bastón presidencial para la asunción de Javier Milei, el nuevo presidente que tendrá Argentina a partir del próximo 10 de diciembre.
Ultimando detalles paras entregar el preciado objeto el 5 de diciembre, Pallarols aprovechó el espacio en una entrevista consignada al canal A24, y deslizó que está "muy contento con esta tradición que se llevó parte de mi vida, pero muy feliz de hacerlo".
Asimismo, explicó que le dedicó los últimos 20 meses a la realización del bastón presidencial, y que "quería batir un récord de participación, y lo empezamos el 13 de abril, cuando siempre lo hacía el 10 de diciembre del año anterior", agregó.
En ese orden, recordó que tuvo "la colaboración de un amigo que viajó en moto por el país para que participen 5 millones de personas en el bastón". Por si fuera poco, no solo trabajaron en él ciudadanos argentinos, sino también figuras de la música internacional como Mick Jagger y Roger Waters, y Paul Stanely, cantante de Kiss.
Qué dijo Juan Carlos Pallarols sobre el el bastón presidencial con la melena
Despejando dudas sobre una versión falsa que circuló en redes sociales, la cual marcaba que Javier Milei le había pedido a Pallarols hacerle una melenita al bastón, el orfebre aclaró que el pedido nunca existió y que todo surgió de la pregunta de una periodista. Por un malentendido, el flamante presidente se enojó, pero "quedó todo ahí, es algo sin importancia", aclaró Pallarols.
Vale precisar que salvo algún pedido especial del presidente de turno, el bastón es siempre el mismo y lo único que se modifica es su longitud "porque se ajusta a la altura de cada presidente".
Además, una vez finalizada la ceremonia de asunción como cada 10 de diciembre, el presidente electo se lleva el bastón a su casa.
