Mientras siguen aumentando los casos de dengue en nuestro país, el bloque de Diputados del PRO presentó un proyecto de ley con el objetivo de que el Ministerio de Salud de la Nación garantice que los centros médicos públicos, obras sociales y prepagas distribuyan de manera gratuita y obligatoria, el esquema completo de vacunación para las personas que ya hubieran contraído la enfermedad.
La diputada Sabrina Ajmechet impulsó la iniciativa denominada "Integración al calendario nacional de vacunación de la vacuna contra el virus del dengue".
Por medio de su cuenta personal en la red social X, la representante de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) sustentó su propuesta al recordar su experiencia personal sobre cuando fue diagnosticada.
"Tuve dengue hace casi 10 años, cuando no se sabía en CABA de qué se trataba ni cómo hacer el seguimiento. Nunca me sentí tan mal en mi vida", aseguró, para después remarcar que los médicos le advirtieron: "Tratá de no contagiarte de nuevo porque el dengue hemorrágico del segundo contagio es mucho más grave".
En este sentido, Ajmechet enfatizó en el poco conocimiento que se tenía del virus transmitido a través de la picadura del mosquito Aedes Aegypty, ya que afirmó que el único consejo que pudieron darle los especialistas que la trataron fue que utilizara repelente contra insectos.
"Hoy por fin me pude dar la vacuna. No es una vacuna accesible y todos los que tuvimos dengue tenemos que dárnosla", expresó al hacer referencia al inoculante desarrollado por un laboratorio japonés y que se trata de la única opción que fue aprobada por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) hasta el momento.
El esquema de vacunación contra el dengue consiste en la aplicación de dos dosis de 0,5 ml cada una, las cuales deben ser inyectadas con un intervalo de tres meses. La inoculación abarca un amplio espectro de la población, debido a que es apta para aplicarse en ciudadanos mayores de 4 años.