La pobreza en San Juan ascendió al 64%
Estos datos oficiales fueron arrojados por Ethos Consultora, que hizo un estudio de la pobreza en el Gran San Juan.
En marzo de 2024, el relevamiento sobre la situación socioeconómica, realizado por Ethos Consultora, en el Gran San Juan, mostro un panorama inquietante: el 63,9% de los participantes del estudio se ubica por debajo del umbral de pobreza. Este salto en el nivel de pobreza se explica por la devaluación en el arranque del nuevo Gobierno Nacional y el fuerte aumento del valor de la canasta básica (56%, por encima del 51,6% de la inflación promedio) entre enero y marzo, con los ingresos de la población trabajadora, jubilados, cuentapropistas y pequeños profesionales y comerciantes incrementándose muy por detrás de esos porcentajes.
El descenso del salario real de los trabajadores registrados es, en este contexto, una señal de alarma. La tendencia a la baja del ingreso real de los ocupados a partir del 2015 y la aceleración de este efecto a principios de 2024 pone en evidencia la pérdida del poder adquisitivo de la clase trabajadora. Esta situación genera una paradoja angustiosa: a pesar de tener trabajo, los sanjuaninos ven cómo su salario pierde la carrera contra la inflación, reduciendo su capacidad para satisfacer las necesidades básicas, llegando el nivel de pobreza al 47,8%.
La caída del consumo, por la pérdida del poder adquisitivo de la población, ha generado una recesión económica y por consiguiente un incremento en la desocupación. En este sentido, los desocupados, sin una fuente regular de ingresos y con un mercado laboral que no ofrece grandes posibilidades de reinserción, son los más perjudicados y alcanzan una tasa de pobreza del 90%.
En cuanto a los jubilados, por su parte, enfrentan una situación igualmente crítica. La jubilación mínima, que debería ser un refugio de estabilidad, se ha desplomado tras la devaluación, arrastrando la calidad de vida de los mayores hacia un abismo marcado por la pobreza, que ahora afecta al 80,2% de ellos.
