Luna de flores de mayo: cómo son los rituales para aprovechar la energía al máximo
La luna de las flores es un fenómeno astronómico que ocurre en esta época del año y, para muchos es un momento de gran espiritualidad.
La llegada de la Luna llena está cada vez más cerca, un fenómeno celeste, conocido como luna de las flores, que despierta gran interés, especialmente entre aquellos que se sienten atraídos por lo esotérico. En nuestro país, podremos disfrutar de este espectáculo astral a partir de la mañana del jueves 23 de mayo, desde las 10:53 horas.
Esta fase lunar recibe su nombre de antiguas tradiciones de los pueblos algonquinos y ojibwe, que asociaban este plenilunio con la plenitud de la primavera en el hemisferio norte. Es un momento simbólico de renovación y crecimiento, donde se invita a reflexionar sobre aspectos de la vida que deseamos cambiar o dejar atrás.
Qué rituales se pueden hacer con la Luna Llena
Uno de los rituales más populares durante la Luna de las flores es el de la liberación. Se sugiere escribir en un papel aquello que deseamos dejar ir o cambiar, y luego enterrarlo en la tierra como una forma de plantar las semillas de futuros deseos y metas. Otros prefieren quemarlo con las intenciones escritas, simbolizando la transformación y el alejamiento de lo negativo.
El baño de Luna es otro ritual popular, donde simplemente nos exponemos a la luz de la Luna llena para absorber su energía. Este acto puede ser revitalizante y relajante, especialmente si se combina con meditación o ejercicios de respiración profunda. Es una oportunidad para conectarse con la naturaleza y con uno mismo.
Durante esta fase, también se puede aprovechar la energía de la Luna llena para cargar cristales y piedras preciosas. Colocarlos al aire libre bajo la luz lunar durante toda la noche puede potenciar y purificar su energía, preparándolos para su uso en prácticas espirituales o de sanación.
En honor al despertar de la naturaleza y al florecimiento de las flores en esta época del año, muchos eligen crear altares con flores frescas o secas como una forma de honrar su belleza y abundancia.
Meditar frente al altar, ofrecer oraciones de gratitud o realizar ceremonias de ofrenda son formas de conectarse con la energía de la Luna llena y la renovación que trae consigo.
