Se tiró junto a sus gemelas de 2 años por un barranco para vengarse de su esposa
Robert Brians, de San Diego, EEUU, admitió los brutales hechos en el juicio que finalizó el 9 de agosto pasado. Los dramáticos detalles del rescate
En un impactante caso de intento de asesinato-suicidio, Robert Brians, de 51 años, de San Diego, Estados Unidos, admitió haber intentado acabar con su vida y la de sus hijas gemelas de dos años. El juicio que culminó el 9 de agosto de 2024 reveló detalles espeluznantes del fatídico día en que el sujeto, devastado por una tormentosa separación, decidió llevar a cabo su plan mortal.
El 13 de junio de 2020, Brians, alterado por la ruptura con su esposa Jenna, recogió a sus pequeñas hijas Hailey y Aubrey de la casa de sus padres en San Diego. Lo que debía ser una visita supervisada se convirtió en una pesadilla cuando, en lugar de regresar a casa, condujo sin rumbo durante horas. Mientras sus hijas dormían en el asiento delantero, Brians iba formando su aterrador plan.
En las primeras horas de la mañana, Jenna comenzó a preocuparse por la ausencia de sus hijas y su esposo. La preocupación se convirtió en terror cuando recibió mensajes de texto escalofriantes: "Las niñas van al Cielo, y yo al Infierno a esperarte", le escribió Brians. Su miedo se intensificó cuando él publicó en Facebook: "Esta noche, envío a mis bebés al Cielo".
El destino de Brians fue Sunset Cliffs, un lugar conocido por su belleza natural en California, pero que esa madrugada se convirtió en el escenario de una tragedia en ciernes. Con el amanecer apenas comenzando, Brians dirigió su camioneta hacia el borde del acantilado. La policía, alertada por Jenna, rastreó su teléfono y llegó justo a tiempo para presenciar cómo el vehículo se precipitaba al vacío.
La camioneta cayó a más de 115 kilómetros por hora, estrellándose contra las rocas y sumergiéndose en las aguas del Pacífico. Sin embargo, los oficiales no se dieron por vencidos. Jonathan Wiese, un oficial con formación en el Cuerpo de Marines, se lanzó al rescate. Amarrado a una correa de perro de 30 metros, descendió por el acantilado hacia el agua.
Wiese encontró la camioneta volcada y semihundida, con Brians y sus hijas adentro. Una de las niñas lloraba aferrada al cuello de su padre, mientras que la otra parecía sin vida. Sin perder tiempo, Wiese utilizó sus habilidades de rescate para llevar a Brians y a las niñas a la orilla. A pesar de las graves heridas, ambas pequeñas lograron sobrevivir.
Brians fue arrestado y enfrentó múltiples cargos, incluidos intento de asesinato, secuestro y abuso infantil. Durante el juicio, se presentaron pruebas contundentes, como los mensajes de texto y publicaciones en redes sociales que demostraban la premeditación de su acto. El 9 de agosto de 2024, Brians se declaró culpable y aceptó una sentencia de 31 años en prisión, evitando así una condena aún más severa.
