Despidieron a dos trabajadoras por la transfusión de sangre con VIH a un nene
Se llegó al fin de un alarmante caso que determinó la negligencia de dos empleadas del sistema de salud de Chaco.
El Gobierno de la provincia del Chaco expulsó a dos trabajadoras del área de Hemoterapia tras una investigación que determinó el suministro de plasma fresco congelado con serología reactiva para VIH a un paciente pediátrico en el Hospital "Dr. Avelino Castelán".
Según la resolución, la investigación comenzó en noviembre de 2019 cuando el Hospital Garrahan de Buenos Aires detectó serología de VIH reactiva en un paciente derivado de Chaco, quien había recibido transfusiones de sangre. A raíz de ello, se instruyó un sumario administrativo en el Centro Especializado de Hemoterapia de la provincia.
El informe concluyó que dos agentes, Graciela Verónica Encina y Bárbara Maura Molina, incumplieron con el descarte de hemocomponentes reactivos, permitiendo que una unidad de plasma fresco con serología positiva para VIH fuera entregada al Hospital Pediátrico de Resistencia y utilizada en un paciente.
Como consecuencia, el gobernador del Chaco Leandro Zdero dispuso la cesantía de ambas trabajadoras mediante decreto, argumentando que incurrieron en faltas graves según el Estatuto del Personal de la Administración Pública Provincial.
El caso generó gran preocupación en el ámbito de la salud y destacó falencias en el sistema de trazabilidad de hemocomponentes, ya que, según la investigación, el desbloqueo se realizaba manualmente debido a la falta de un sistema informático desde 2013.
Las autoridades sanitarias indicaron que se reforzarán los controles en la manipulación y distribución de hemocomponentes para evitar futuros errores de este tipo.
A propósito, Maura Molina se había defendido al exponer que trabajan "en una mesada de usos múltiples, que también se usa para etiquetar unidades y preparar hemocomponentes para envío".
