La historia de "la dama del ácido", la mujer que quemó a su marido para no dividir los bienes gananciales
Cuando Larissa volvió y vio la situación, incrementó aún más su ira. En ese estado, le dijo a algunos de sus colaboradores que si mataba a su marido, sus problemas terminarían. Ese mismo mensaje solía darle a sus vecinos, a su manicura o en la iglesia adónde asistía.Larissa le pidió a una amiga que alquilara a su nombre un galpón bajo la excusa de que quería guardar algunas cosas fuera de la vista de Timothy. Luego, aprovechó un viaje de él por trabajo, arrebató la puerta de su vivienda, recuperó los muebles y los guardó en ese sitio.Cuando Timothy regresó, encontró saqueado su nuevo hogar y decidió mudarse a una casa con un sistema de alarmas y sensores de movimiento, compró un arma y pidió un permiso para portarla. También les avisó a sus amigos sobre la situación que estaba atravesando.En abril de 2003, Larissa compró un barril de más de 200 libros, y lo hizo enviar a su laboratorio. No era, en absoluto, del tipo de los que se utilizaban allí. No conforme con el tamaño, le preguntó a un empleado si creía que allí podría entrar una persona. Su interlocutor no olvidó esta extraña pregunta.Por otro lado, había comprado enormes cantidades de ácido clorhídrico, ácido sulfúrico y ácido acético, los cuales eran totalmente inusuales para su laboratorio. El 9 de julio Timothy cenó con tres compañeros de trabajo y quedaron en verse al día siguiente. Sin embargo, él no fue a la cita. Al hacer la denuncia ante la Policía e indagar a la mujer, ella negó todo.En el allanamiento a la casa de Timothy, descubrieron una pistola debajo de la almohada y un microcassette con mensajes grabados de Larissa. Luego, llamaron a declarar a un ex empleado de Larissa, James Fagone, un joven de 21 años que había sido colaborador en el laboratorio. James no aguantó el interrogatorio. Enseguida se quebró y reveló él y Larissa eran los responsables de la desaparición de Timothy.De acuerdo a su relato, en la madrugada del 10 de julio, Larissa llamó a su ex y le dijo que Tyler estaba enfermo. Con esa excusa logró que Timothy, le abriera la puerta de su casa. Enseguida, James le disparó con una pistola paralizante, se desplomó y Larissa aplicó contra su cara trapos impregnados con cloroformo.Juntos lo llevaron a la casa de Larissa, lo ubicaron en el barril y agregaron el resto de los ácidos. En tanto, los datos recabados posteriormente estuvieron en concordancia con esta versión.