Último comunicado sobre la salud del papa Francisco tras su audio desde el hospital: "Noche tranquila"
El Sumo Pontífice continúa con la terapia prescrita en el hospital Gemelli. Qué dice el último informe del Vaticano.
El papa Francisco continúa internado en el hospital Gemelli de Roma y desde el Vaticano emitieron un nuevo parte médico respecto a su salud, luego de que ayer se difundiera un esperanzador audio del Sumo Pontífice. "La situación parece estable en un cuadro complejo", sostuvieron.
"El Papa ha transcurrido una noche tranquila y se ha despertado poco después de las 8:00", indicó la Oficina de Prensa de la Santa Sede este viernes sobre el estado de salud de Francisco.
Según informaron, el Papa continuaba esta mañana la terapia prescrita y está realizando fisioterapia motora. Además, continúa alternando ventilación mecánica por la noche y oxigenación de alto flujo durante el día con el uso de cánulas nasales.
En el boletín de ayer, la Oficina de Prensa informó de que el estado clínico del Papa era estable respecto a días anteriores. No ha habido episodios de crisis respiratoria ni fiebre.
El papa Francisco habló por primera vez desde el hospital
Ayer por la tarde hubo gran emoción en la Plaza de San Pedro cuando, antes del rezo del Rosario por la salud del Papa, se difundió un audio grabado en Gemelli en el que el Pontífice agradecía las oraciones y la cercanía.
"Agradezco de todo corazón las oraciones que hacen por mi salud desde la Plaza, los acompaño desde acá. Que Dios los bendiga y que la Virgen los cuide. Gracias", expresó en el mensaje que marcó su primer contacto directo con los fieles desde su hospitalización.
A pesar de su mejoría, fuentes cercanas al Vaticano aseguran que Francisco sigue con movilidad reducida y un estado de salud delicado, lo que podría forzar cambios en la agenda papal.
El papa Francisco, de 88 años, permanece internado desde el 14 de febrero debido a una neumonía bilateral y problemas respiratorios.
En el Vaticano hay incertidumbre sobre su participación en las ceremonias de Semana Santa, una de las fechas más importantes del calendario litúrgico. En años anteriores, el Sumo Pontífice ya había delegado algunas celebraciones debido a problemas de salud, y en esta ocasión no se descarta que deba hacerlo nuevamente.
