¡Fuera olores! Tips infalibles para un hogar sin fragancias indeseadas
Descubrí los secretos de expertos sanjuaninos para erradicar esos olores que te amargan la vida en casa. Soluciones caseras y económicas que te dejarán boquiabierto.

Si pensás que los olores en tu casa son una condena divina, te tengo buenas noticias: ¡hay trucos que son un verdadero golazo! Acompañame en este recorrido por las mejores formas de dejar tu hogar fresquito sin gastar una fortuna.
Primero, metamos el bicarbonato de sodio en la lista, que este amigo es como el superhéroe de la limpieza. Según los genios de La Nación, "el bicarbonato de sodio es uno de los productos caseros más exitosos para limpiar la casa". Te recomiendo dejar un par de recipientes en la heladera. Hacelo y gracias después, ¡los malos olores desaparecen sin dar aviso!
Pero, ¡no nos quedemos ahí! Nuestro querido ferretero local, el loco @marcos_s_gabriel, se volvió viral en TikTok con su técnica para desenmascarar esos olores horribles de las tuberías. ¡Tomá nota! Mete media taza de vinagre con agua caliente en el desagüe y dejalo actuar un rato. Si hay clavos por ahí, también los podés usar, que son buena onda para neutralizar olores extraños.
Apuesto a que no esperabas esto: los cítricos son la sensualidad en forma de fruta. Corta un limón en rodajas y metelo en un recipiente con agua hirviendo. Lo dejás un rato y tu casa va a oler a primavera. ¡Todo bien, sin gastar un mango!
"Si el olor a tabaco te acompaña, vinagre diluido es lo tuyo", advertía un experto en infobae.com. Mismo si tenés una habitación con ese aroma a años 90, echale un poco a los tejidos y adiós a esa fragancia de fumador profesional.
Y para cerrar la jornada de mitos y maravillas, no podía faltar la aromaterapia. Las velitas y aceites esenciales son ideales para dar un toque personal y atrapador. ¿Quién no quiere que su casa huela a algo rico y no a comida quemada?
Así que ya sabés, si la vida te da olores, hacé limpieza a fondo y salí a comprar esos ingredients humildes. Tus amigos te lo van a agradecer y encima, ¡brindás por un hogar fresquito! A seguir disfrutando con picardía, pero sin olores que tiren para atrás. ¡Sale codo al vino, che!