Qué se conmemora y por qué es importante el Viernes Santo
Es una de las fechas más relevantes para la Iglesia Católica. Recuerda los hechos que llevaron a la crucifixión y resurrección de Jesucristo.

Entre el 13 y el 20 de abril se celebra en gran parte del mundo la Semana Santa, una de las fechas más relevantes para la Iglesia Católica. Este periodo conmemora los hechos que, según la tradición cristiana, llevaron a la crucifixión y resurrección de Jesucristo.
La Semana Santa marca el final de la Cuaresma. Comienza con el Domingo de Ramos, que recuerda la entrada de Jesús en Jerusalén, y culmina con el Domingo de Resurrección, conocido también como Pascua.
Durante estos días, la Iglesia propone a sus fieles intensificar la oración, la limosna y el ayuno.
Qué se recuerda en el Viernes Santo
El Viernes Santo es el día en el que se conmemora la Pasión y Muerte de Jesucristo. Según los Evangelios, Jesús fue detenido, juzgado y condenado a muerte por crucifixión bajo la autoridad de Poncio Pilato, representante del Imperio Romano en Judea. La tradición relata que fue obligado a cargar la cruz hasta el Monte Calvario, donde fue ejecutado junto a dos ladrones.
Este día representa, dentro del calendario litúrgico católico, un momento de luto y penitencia. No se celebran misas, y las ceremonias están centradas en la adoración de la cruz, la lectura de la Pasión y la Comunión, sin la consagración de la Eucaristía. El ambiente litúrgico se caracteriza por la sobriedad y el silencio, en contraste con la celebración que representa la Pascua.
Prácticas religiosas durante el Viernes Santo
Durante el Viernes Santo, los fieles participan en actos como el viacrucis, una representación del camino de Jesús hacia la crucifixión, dividido en estaciones que rememoran diferentes momentos de ese recorrido, como sus caídas, su encuentro con su madre María y la crucifixión.
Además, se mantiene la tradición de no consumir carne roja en señal de respeto y penitencia. Esta práctica se vincula al ayuno de Jesús durante cuarenta días en el desierto, y es considerada por muchos creyentes como un gesto de sacrificio y purificación.
De acuerdo con el portal oficial de noticias del Vaticano, Vatican News, el ayuno y la abstinencia del Viernes Santo tienen raíces antiguas y se extendieron históricamente a todos los viernes del año, aunque con el tiempo se mantuvieron principalmente en fechas claves del calendario litúrgico.
Aunque su significado es religioso, la jornada también tiene impacto cultural en distintos países, donde se realizan procesiones, representaciones teatrales y diversas manifestaciones públicas vinculadas a la tradición cristiana. (Clarín)