Fueron a ver si un hombre estaba bien: les confesó que tenía un cadáver desde 2018
Había gente preocupada David McMichael, un residente de Texas (Estados Unidos) de 67 años, y se pidió que las autoridades pasen por su casa para corroborar su estado. A raíz de ello, en el marco de un control de bienestar, los agentes se dirigieron a su domicilio y dialogaron un rato con el hombre. Cuando le preguntaron si sabía las razones de la visita, sorprendió con la confesión de que "tenía un cadáver desde 2018, en su cocina".
Entonces, los efectivos se dirigieron hacia ese ambiente de la casa y hallaron restos óseos masculinos, por lo que arrestaron McMichael.
Poco después, los investigadores apuntaron que los restos humanos serían de su hijo, Jason McMichael, y trasladaron el cuerpo al Instituto de Ciencias Forenses del Suroeste en Dallas para la identificación positiva.
Las autoridades creen que el hijo del detenido murió en mayo de 2018 y desde entonces guardaba sus restos, aunque David no reveló por qué.
Mientras avanza la investigación, quedó acusado de abuso de cadáver.
